📅 15 de mayo de 2022
⏰ Tiempo estimado de lectura: 5 minutos
***
Si estás leyendo esto en la web o porque alguien te lo envió, te cuento que puedes recibirlo directamente en tu correo electrónico cada domingo a mediodía, si te suscribes 😉
“Yo no guardo ahí secretos de Estado”, me dijo cierto cliente cuando me negué a recibir los datos de inicio de sesión de una de sus redes sociales para completar un trabajo. “Hay cosas que deben ser privadas, aunque no sean un secreto de Estado”, le respondí.
Y es que nos hemos acostumbrado a dejar regados una gran cantidad de datos en Internet, sobre todo en Redes Sociales, con la excusa de que no tenemos nada que esconder.
Son muchas las personas que consideran que no tienen nada que esconder porque “no están haciendo algo ilegal o amoral”, pero la privacidad va más allá de los actos indecorosos. Te cuento, muy brevemente, por qué la privacidad es importante.
Menos poder para los demás
Mientras menos información sobre nosotros tengan gobiernos, empresas y personas, menos poder podrán ejercer sobre nosotros.
Facebook sabe qué películas, música, libros, comidas y actividades nos gustan. Además, sabe cuando tenemos un problema personal porque lo publicamos en el estado, o a dónde viajamos porque subimos las fotos (y cuando viajamos, porque esas fotos pueden contener ese dato) e incluso las páginas que visitamos, porque guarda un archivo en nuestros equipos que nos rastrea incluso cuando salimos de la red social.
Con toda esta información Facebook nos conoce tan bien que no se le hace difícil manipular nuestro comportamiento por medio de los algoritmos de recomendación u ofrecernos publicidad tan precisa que pareciera que nos espían, pero lo cierto es que nosotros le damos toda la información.
En este artículo de tecnopapapi.com te cuento otros ejemplos relacionados con la seguridad y la privacidad, sobre cómo podemos darle a ciertas personas poder para hacernos daño porque consideramos que no tenemos nada que esconder.
Para proteger tu vida y tu reputación
En esta sociedad súper conectada, la privacidad juega una parte fundamental en el cuidado de tu percepción pública. Muchos son los casos de personas que no logran obtener un trabajo porque su potencial jefe decidió revisar sus perfiles de redes sociales antes de contratarle y encontró fotos de ellas bebiendo o festejando, o porque encontró alguna opinión política contraria a la suya.
También se han visto casos de fotos o videos que se convierten en meme y en los que la persona que aparece sale perjudicada y su vida cambia para siempre. Algunas logran sacar provecho de la situación, pero no siempre es el caso.
Que te hayas emborrachado en aquella fiesta en la playa no significa que no merezcas un trabajo porque te consideren un borracho, o porque no te alquilen un apartamento porque eres muy parrandera. Ciertas situaciones no te definen, pero fuera de contexto, pueden cambiar el modo en que los demás te ven.
Para ser libre de hacer lo que quieras
Directamente relacionado con el punto anterior, tú, como persona, tienes derecho a defender a uno u otro partido político, a emborracharte un fin de semana en la playa o a tomarte una foto ridícula sin que los demás te juzguen o saquen conclusiones. Pero cada una de estas acciones, sacada de contexto en una red social, puede quitarte esa libertad.
Por eso siempre necesitamos un espacio para nosotros mismos, por eso no nos gusta que nos vean cuando estamos sentados en la poceta, o nos jorungamos la nariz cuando nadie nos ve, porque todos tenemos una identidad que proteger y, si todo está a la vista de todos, esa identidad se pierde.
“Hay cosas que deben ser privadas, aunque no sean un secreto de Estado”
¡Pausa, Cafecito ☕!
Si te gusta mi trabajo y quieres hacer un aporte para colaborar, puedes hacerlo desde PayPal a través de mi perfil en Ko-Fi. También puedes hacerlo vía Reserve o pago móvil si estás en Venezuela. Cada propina ayudará a mantener el proyecto vivo. Para más información de cómo aportar, ¡dale al botón!
Algunos consejos para cuidar tu privacidad
Ya que estamos aquí, te dejo algunos rápidos consejos para cuidar tu privacidad:
1.- No compartas todos tus momentos de manera pública en Internet. Si deseas compartir algún recuerdo, usa los filtros de privacidad para decidir quién puede ver lo que publicas.
2.- Limita las etiquetas. Redes como Facebook e Instagram te permiten controlar quienes te etiquetan en fotos y publicaciones y te dan la posibilidad de aprobar qué etiquetas se publican y cuáles no, usa esas herramientas para cuidar tu imagen pública.
3.- Configura la cámara de tu teléfono para que no guarde la ubicación y otros datos sensibles de las fotografías que tomas, algunas redes sociales toman y almacenan esos datos, y nunca sabes con quiénes lo comparten.
4.- Habla con tus familiares y cuéntales sobre la importancia de mantener privados algunos momentos como viajes, fiestas o actividades específicas, y hazles saber cuándo te gustaría mantener una foto privada o cuándo no te molestaría compartirla.
Esta semana en el blog
Esta semana te dejé en el blog un artículo que te enseña rapidísimo cómo aprender a usar las recién estrenadas reacciones de Whatsapp, dale un vistazo y ponte al día con la moda.
También puede que te interese saber cómo crear tus propios códigos QR y para qué puedes utilizarlos. Yo uso uno, de hecho, para quienes quieren hacerme llegar donaciones vía Reserve.
Por último, y ya que estamos hablando de seguridad y privacidad, te enseño tres métodos rápidos y fáciles para crear contraseñas más seguras para tu correo, banca en línea y redes sociales.
¡Y listo!
Si llegaste hasta aquí de verdad te doy las gracias infinitas, el hecho de que leas este boletín y visites los enlaces significa un mundo para mi. Si lo leíste en la web y te gustó, dale clic al corazoncito aquí al final, para saber si lo estoy haciendo bien o si debo mejorar algo para convencerte 😉.
¿Tienes alguna pregunta, comentario o sugerencia? No dudes en responder a este correo o escribirme en Twitter, en Facebook, en Telegram o en Instagram. ¡Hasta la próxima semana!